{image}http://www.eldia.co/images/stories/260510/002.jpg{/image}Después de la firma del Tratado de Libre Comercio (TLC), entre Colombia y la Unión Europea, el gobierno de Álvaro Uribe quiere destrabar el acuerdo comercial adelantado con Canadá, y dejarlo aprobado antes de terminar su mandato presidencial
Recordamos que el mes pasado, El ministro de Industria y Comercio, Luis Guillermo Plata, se reunió con diferentes círculos empresariales de Canadá, así como legisladores y otros funcionarios políticos cercanos al gobierno de Ottawa, para buscar a la implementación reglamentaria del acuerdo base, el cual fue aprobado por el Comité Permanente de Comercio Internacional de dicho país en el 2009.
Al igual que en Estados Unidos, un sector de la clase política canadiense se opone a una aprobación de dicho acuerdo, debido a la política laboral de nuestro país, así como la continua violación de los derechos humanos.
No sabemos a ciencia cierta, cual es el interés del gobierno nacional de seguir buscando acuerdos bilaterales con diferentes países del mundo, si esta comprobado que el desarrollo económico y social de las naciones no se basa en el comercio internacional, sino en el fortalecimiento de los sectores económicos internos, tal como la industria y la agricultura.
Congresistas del Polo Democrático y el Partido Liberall, han denunciado lo nefasto que resultaría para la economía nacional, la entrada en vigencia de tantos TLCs, en especial, los adelantados con Estados Unidos y la Unión Europea.
Respecto al TLC adelantado con los Estados Unidos, es poco probable su aprobación antes de que finalice el gobierno de Uribe, debido a la postura del Partido Demócrata de no aprobar dicho acuerdo hasta que se vean avances reales en materia de Derechos Humanos en nuestro país.
Esperamos que el próximo habitante de la Casa de Nariño, tenga como política económica, el fortalecimiento del mercado interno y el aumento de la demanda interna, verdaderas estrategias para sacar al país de la recesión económica en la que esta, y no continuar buscando la aprobación de tanto TLCs, los cuales solo atentan contra la actividad productiva.