{image}http://www.eldia.co/images/stories/091110/004.jpg{/image}“Nosotros hemos venido denunciando con los sindicatos del sector mineroenergético, el asesinato de ocho de sus dirigentes desde el 2002 a hoy”, declaró Alberto Vanegas, secretario de Derechos Humanos de la CUT, al edia.co, refiriéndose al llamado que le acaba de hacer una Corte de EE.UU. al ex presidente Uribe.
Como se sabe, un grupo de juristas norteamericanos entabló un requerimiento para que el ex mandatario responda ante una Corte por la actitud de la multinacional Drummond, acusada de ser responsable de varios asesinatos de líderes sindicales de esta empresa en la costa norte colombiana.
Vanegas añadió que “la implementación de la industria extractiva del carbón por parte de la Drummond ha significado por años la expulsión de comunidades, el atropello a los derechos laborales y la muerte, a través de grupos paramilitares, de decenas de dirigentes obreros”.
“El pasado 27 de octubre fue asesinado Willian Tafur, trabajador de la Drummond que vivía en El Paso, Cesar, y su cadáver arrojado frente al Sena de Santa Marta”, señaló Vanegas.
Indicó que “por haber presentado un legítimo pliego el sindicato de la Drummond, la compañía en mayo pasado pagó costosos avisos de prensa declarando que los trabajadores recibían excelentes inmejorables y que las condiciones laborales no podían ser mejores mientras estigmatizaban a la dirigencia sindical continuando con ese clima antisindical”.
El dirigente de la CUT afirmó que “le ha tocado a los familiares, viudas e hijos de las decenas de sindicalistas de la Drummond, con el apoyo del movimiento sindical colombiano y de los EE.UU., entablar las querellas correspondientes en busca de verdad, justicia y reparación”.
“La citación a Uribe que le hace una Corte norteamericana se inscribe en esta situación de búsqueda de justicia”, enfatizó, recordando como bajo su mandato el DAS espió y persiguió a los dirigentes sindicales del país.
Recordó como los paramilitares fueron financiados por una multinacional como la Chiquita en el Urabá, hecho reconocido por los propios jefes presos hoy en EE.UU. bajo el gobierno de Uribe.
Declaró que “en lo que va corrido de este año, ya han sido asesinado 36 sindicalistas en todo el país y no se ve por ninguna parte el esfuerzo del gobierno por detener esta oleada sangrienta”.
Sobre posibles acciones del movimiento sindical, Vanegas concluyó que “estamos haciendo un llamado a todas las organizaciones sociales y populares, a las defensoras de Derechos Humanos, para que nos movilicemos en todo el país el 10 de diciembre, Día Mundial de los Derechos Humanos”.