La situación por la que atraviesa la Capital del País, con la destitución ilegal del Alcalde mayor de la ciudad, no se debe tomar a la ligera o como un hecho aislado, debemos observar el contexto del mayor ataque, de la derecha radical del país desde la década del 90 a las Fuerzas y Movimientos Sociales.
Las actuaciones del procurador Ordoñez, no son producto solo de una mente calenturienta y sectaria, enferma y dogmatica (que lo es), es un plan perfectamente orquestado desde un aparato de la derecha rampante, que pretende acallar cualquier vestigio de oposición política,racional y pensante en este país.
Los ataques que está sufriendo nuestro alcalde Gustavo Petro, funcionario electo por voluntad popular, por parte del procurador Ordoñez, en un acto claramente fascista, Violenta los Tratados Internacionales y la Normatividad Interna de Colombia, pues solo un Juez de la República puede fijar tal condena, hecho este por el cual Gustavo Petro acudió a Instancias Internacionales a denunciar esta encerrona.