De la misma manera en cada una de las tareas asignadas por la dirección sindical como directiva y como delegada nacional. Dios de la fuerza, la resignación y el amparo a toda su familia, en estos momentos de dolor y sufrimiento.
A nuestra compañera la llevaremos siempre en nuestro corazón y a su familia en nuestras oraciones para la protección de nuestro Dios y Padre.
Sabemos que dejo muchos amigos en toda nuestra organización, los cuales comparten este lamentable hecho.
Dios la tenga en su santa gloria.