La reforma financiera propuesta por el gobierno en el mes de marzo y que se viene discutiendo en la comisión tercera del senado y cámara, además de tener cambios en el servicio ofrecido por las entidades financieras, propone cambios estructurales para estas.
Cambios de nombre, delineamientos de funciones, ampliación de servicios, son de los cambios al sistema financiero que se compilan en la reforma financiera que se sigue debatiendo en las comisiones terceras del senado y cámara.
La propuesta, fue radicada por el ejecutivo en el mes de marzo de este año y ha sido objeto de debates, contrapropuestas, análisis, aprobación y rechazo de algunos de sus componentes. El ejecutivo postulaba que esta sería una reforma estructural que cambiará de manera profunda el actual sistema financiero. Sin embargo, desde ya, esta propuesta que aún falta por ser aprobada en su totalidad, tiene serias críticas por parte de entidades del sector financiero como Asobancaria consideran que la reforma no es integral y no va a generar cambios trascendentales ya que no se modifican las leyes que estructuran el sistema financiero como la ley 45 de 1990, 510 y 546 de 1999 y 795 de 2003.
No obstante, a pesar de esta crítica, lo cierto es que la reforma en algunos aspectos si traerá cambios sustanciales. Entre estos cambios esta la modificación de la estructura del sistema financiero, modificación al Estatuto Orgánico del Sistema Financiero (Eosf) que rige todas estas entidades.
Así mismo, las Compañías de Financiamiento Comercial (CFC), cambiarían de nombre para ser llamadas Compañías de Financiamiento quitando el último nombre de comercial por considerar que estas compañías, brindan financiamiento a clientes no solo del sector comercial.
Las casas de cambio también cambiarán de nombre y serán llamadas “Sociedades de Intermediación”, pues con esta nueva denominación se deslinda la confusión que reina en este mercado en general y los usuarios en particular, que las confunden con los profesionales del cambio o cambistas, quienes, por cierto, operan con un régimen de licencia más reducido y no están sometidos a la inspección y vigilancia de la Superintendencia Financiera.
También se propone una ampliación del catálogo operativo y del portafolio de servicios de los establecimientos bancarios al permitírseles realizar operaciones de leasing, también se autorizará a los bancos comerciales el manejo de las cuentas de ahorro programado obligatorio.
Por su parte, el Banco de Comercio Exterior (Bancoldex) y Financiera de Desarrollo Territorial (Findeter) se les quitaría el sometido a disposiciones relativas a encaje y captaciones.