{image}http://www.eldia.com.co/images/stories/250110/financiero2.jpg{/image}Para una economía en recesión, con crecimiento nulo como es el caso de Colombia, resulta sorprendente la cifra de ganancia de la Bolsa de Valores de Colombia, donde sus utilidades netas tuvieron un aumento de 83%, respecto a las del año anterior.
Estas cuantías no corresponden al total de ganancias obtenidos por todas las empresas que tienen acciones en el mercado bursátil, sino simplemente al manejo operacional de dicha empresa.
Si a esta cifra irrisoria, le sumamos las ganancias de las empresas del sector financiero, nos damos cuenta, que este sector fue el único que no presento perdidas en el año pasado. Esta situación de superávit en las ganancias del sector financiero, muestra supuestamente la fortaleza y solidez económica de dicho sector.
Después de la crisis del sistema financiero colombiano en el 2002, las leyes colombianas en torno a este sector han estado encaminadas a proteger dicho sector, lo que se traduce, en garantizar las estabilidad y de paso las ganancias netas en su conjunto de las empresas participantes en dicho sistema.
No estaría mal, que un gobierno protegiese el sector financiero de su respectivo país, pero en el caso colombiano, la protección financiera se ha hecho a costa del detrimento del poder adquisitivo de la mayoría de colombianos.
Impuestos como el 4x1000, los altos costos de intermediación financiera avalados por el gobierno nacional, son ejemplos de política nacional que han garantizado las ganancias exageradas del sector financiero en los últimos 8 años.
Una protección del sistema financiero no es mala, en el caso de que sirviese al a estimular la producción nacional y al desarrollo económico y social del país, pero en nuestro país, la protección financiera no ha logrado sacar del atraso tecnológico e industrial que vivimos desde hace varias década y tampoco ha logrado un mejoramiento del bienestar social de la población colombiana.
El gobierno nacional debería poner el mismo empeño que coloca en la protección del sistema financiero y proteger la industria nacional, así como la protección del patrimonio público, debería además fomentar la agricultura así como el desarrollo integral de una industria fuerte en el país.
Tantas cosas que hay por hacer para fomentar una actividad económica solida y el gobierno solo protegiendo a los más ricos del país, esperemos que se acuerde de los pobres.
Si a esta cifra irrisoria, le sumamos las ganancias de las empresas del sector financiero, nos damos cuenta, que este sector fue el único que no presento perdidas en el año pasado. Esta situación de superávit en las ganancias del sector financiero, muestra supuestamente la fortaleza y solidez económica de dicho sector.
Después de la crisis del sistema financiero colombiano en el 2002, las leyes colombianas en torno a este sector han estado encaminadas a proteger dicho sector, lo que se traduce, en garantizar las estabilidad y de paso las ganancias netas en su conjunto de las empresas participantes en dicho sistema.
No estaría mal, que un gobierno protegiese el sector financiero de su respectivo país, pero en el caso colombiano, la protección financiera se ha hecho a costa del detrimento del poder adquisitivo de la mayoría de colombianos.
Impuestos como el 4x1000, los altos costos de intermediación financiera avalados por el gobierno nacional, son ejemplos de política nacional que han garantizado las ganancias exageradas del sector financiero en los últimos 8 años.
Una protección del sistema financiero no es mala, en el caso de que sirviese al a estimular la producción nacional y al desarrollo económico y social del país, pero en nuestro país, la protección financiera no ha logrado sacar del atraso tecnológico e industrial que vivimos desde hace varias década y tampoco ha logrado un mejoramiento del bienestar social de la población colombiana.
El gobierno nacional debería poner el mismo empeño que coloca en la protección del sistema financiero y proteger la industria nacional, así como la protección del patrimonio público, debería además fomentar la agricultura así como el desarrollo integral de una industria fuerte en el país.
Tantas cosas que hay por hacer para fomentar una actividad económica solida y el gobierno solo protegiendo a los más ricos del país, esperemos que se acuerde de los pobres.