Las decisiones tomadas por el Banco Emisor para  desacelerar el consumo interno, ha empezado a tener sus primeros efectos, aparte de desacelerar la economía y golpear la meta de inflación, y el aumento desmesurado de las tasas de interés bancarias, estas ultimas están golpeando el microcredito, el cual es utilizado por las microempresas colombianas, que en ultimas son las mayores generadoras de empleo (hablamos del sector formal), y que han visto encarecer sus préstamos, los cuales pasaron de un 21,48% en el 2006 a un 31,14% este año.

Dicho aumento es provocado por la libertad que poseen los bancos comerciales para fijar las tarifas de intermediación económica, aunque en la actualidad hay un límite para las tasas de usura para microcreditos, los Banqueros muestran su disgusto con dicha medida, por que de no existir esta imposición,  los créditos para las microempresas serian más altos.

Por dicha situación, a los microempresarios se les cataloga en los bancos, como los clientes mas riesgosos, por encima de los consumidores de crédito para vivienda, y son un desestímulo para prestarles, por eso los bancos han optado por  ponerle demasiadas trabas al sector de la microindustria y los desembolsos hechos por el sector financiero a los microempresarios, este año ha disminuido casi un 10% respecto al 2006.

Lo paradójico de las decisiones tomadas por el Banco Emisor, es que  las perdidas que sufrirá la economía nacional  por el aumento de las tasas de interés de dicha entidad,  será solo, para los colombianos pobres, los trabajadores, y los microempresarios, porque los grandes empresarios, las multinacionales y los banqueros serán los únicos ganadores con dichas medidas, es decir, una concentración mas de la riqueza de nuestro país en manos de unos pocos.

Pobre nuestros queridos banqueros, sus pequeñas ganancias obtenidas por intermediación financiera no les alcanzan para cubrir sus necesidades y quieren seguir  aumentando las tasas de usura para seguir obteniendo utilidades enormes, además, toda traba que se le imponga por los organismos competentes se  les vuelve un problema y un desestímulo para ellos, y las políticas financieras utilizadas para sacar el sector adelante se vuelven incierta.

Es hora de que el Gobierno siempre tome medidas para beneficiar la Banca y piense mejor en que las nuevas políticas que vayan a tomar, beneficien a todo el país, económicamente hablando se debe estimular la industria nacional tanto grande como pequeña, esto significa, un buen acceso al crédito para sacarlas adelanta, porque si se estimula la producción con empleo y salarios dignos, se estimulara la demanda y el crecimiento económico será sostenible y sin tanta especulación.


Páginas recomendadas