{image}http://www.eldia.co/images/stories/270410/009.jpg{/image}Este 1º de mayo será muy especial. La fecha que conmemoran todos los trabajadores del mundo en homenaje a los mártires de Chicago, movilizará a miles de colombianos en actos de repudio a la gestión uribista que al finalizar sus aciagos ocho años, deja más pobreza a todos lo hogares del país.
Será el último 1º de mayo con el actual inquilino en Palacio, responsable de las peores tragedias para la nación y quien forcejeaba por perpetuarse en el poder.
Un breve repaso da cuenta de esto. Bajo su mandato, la salud quebró por completo y la nación anda endeudada sin pagar las cuentas a las empresas privadas del sector, en rubros que pasan de los 2.7 billones mientras estas se han enriquecido sin conocer límite
La informalidad laboral alcanza al 58.3% de la población ocupada, lo que equivale a 5.335.000 trabajadores; el 85.2% de estos ocupados no están cubierto por alguno de los componentes del sistema de seguridad social.
En materia de empleo el panorama no puede ser peor. La demagógica propuesta de 2002, cuando asumió el mando, de mantener el índice de desocupación en un solo dígito, se rompió como un tiesto. La cifra ronda por el 14.5%, la más alta de la región.
La reforma laboral según la cual arrebatándoles a los trabajadores el triple salarial de domingos y festivos, así como las horas extras nocturnas de 6 a 10 de la noche, se daría impulso a la creación de nuevos puestos de trabajo, resultó ser el peor atraco a la fuerza laboral.
Y qué decir sobre la defensa de la vida y garantías a los ciudadanos. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos hace un par de semanas entregó un informe desolador: Colombia es uno de los peores países del mundo en este campo.
Según las Naciones Unidas, en el último periodo se han producido más de 2.500 falsos positivos y el representante de la Cruz Roja Internacional en Colombia, señaló el pasado 23 de abril que se registraron en 2009 unas 800 violaciones del Derecho Internacional Humanitario, entre los que se incluyeron 28 casos de homicidios.
Los ocho años seguridad democrática tampoco pudieron eliminar a las guerrillas. Estas, por el contrario, se han fortalecido según acaba de decir el mismo delegado de la Cruz Roja, Christophe Beney, desde Ginebra.
Sin embargo, en otro mal para los trabajadores, Colombia es el país que más invierte en guerra, en América Latina, cerca del 21% del presupuesto nacional, por encima de educación para obtener semejantes resultados. Y con el ejército más numeroso, por encima de Brasil doblándolo en efectivos.
El país también termina con el mandato de Uribe, más aislado que nunca en la arena internacional. Enemistado con Ecuador y Venezuela, se unció aun más a EE.UU. entregándoles siete bases en la peor afrenta a la soberanía nacional en estos 200 años de independencia.
Y al candidato preferido de Uribe, Juan Manuel Santos, la Corte Suprema de Justicia de Ecuador le acaba de dictar orden de captura con fines de extradición por haber ordenado la agresión al vecino país. ¿Pude un país decente tener en Palacio a un presidente con semejante dictamen?
Mientras tanto alguien se ha enriquecido. La Superintendencia Financiera reporta que para el 2009 se presentaron incrementos de las utilidades de los intermediarios financieros y la banca con relación a lo acontecido en el 2008. A diciembre del 2009 dichas utilidades alcanzaron $8.5 billones, más de $2 billones con relación al año inmediatamente anterior; los establecimientos de crédito obtuvieron $5.5 billones, las aseguradoras $1.39 billones.
De contera, Colombia acaba de ser catalogada por el informe Habitat de las Naciones Unidas como el país más desigual del mundo y el segundo en la peor distribución de la tierra.
Los trabajadores, golpeados como nunca en sus bolsillos y en su salud, marcharán de nuevo por las calles y avenidas de Colombia este 1 de mayo, exigiendo un mañana mejor, lejos de las promesas neoliberales de tantos candidatos que solo sufrimiento y dolor han llevado a los hogares colombianos.