{image}http://eldia.co/images/stories/031110/005.jpg{/image}El pasado 2 de noviembre, La Alcaldía Mayor de Bogotá dio a conocer los ganadores de 12 de las 13 zonas de operación del Sistema Integrado de Transporte Público, el cual tiene como novedad la utilización de tarjetas inteligentes para su utilización

Francisco Mora, Presidente del Sindicato Nacional de Transportadores Públicos (SNTP), manifestó que Bogotá fue dividida en 13 cuencas y las patentes de explotación entregadas por la alcaldía fueron dadas a los mismos gerentes que vienen explotando a conductores de buses y pequeños  propietarios desde hace 40 años.

Argumentos como la guerra del centavo fueron utilizados para promover la integración del transporte público bogotano, pero según la SNTP en Transmilenio se ejerce un control sobre los conductores de los buses rojos y verdes, con el objetivo de cumplir las metas propuestas, y aunque no manejen dinero, la guerra por los pasajeros continúa.

Un tema delicado, aun no resuelto por el alcalde Samuel Moreno, fueron los 4000 vehículos que  no quisieron entregar los cupos a las respectivas operadoras, donde sus dueños no saben si pueden trabajar o no.

En estas licitaciones, los más perjudicados  fueron los pequeños propietarios, los  cuales al no ponerse de acuerdo para defender sus derechos, verán disminuidos sus ingresos  de manera dramática, en cambio, los ganadores son las cúpulas de las diferentes operadoras del transporte bogotano, aseveró Francisco Mora.

Bogotá debe mejorar su movilidad, porque la existente es un  riesgo de salud para conductores y pasajeros, y toda propuesta que busque dicho objetivo es bienvenida en los conductores de transporte público de la ciudad.

Pero las propuestas deben ser incluyentes, con sentido social, porque la realizada por el Alcalde Samuel Moreno, se llevó a cabo sin la participación de los conductores y los pequeños propietarios, incluso,  la organización sindical le pidió al alcalde bogotano varias reuniones para expresar su inconformidad pero nunca fueron atendidos, comentó Francisco Mora.

Por último, es necesario buscar soluciones a la caótica movilidad bogotana pero sin desconocer los derechos de los conductores, pequeños propietarios, pero sobretodo, buscando la economía de los  pasajeros, no como ocurrió con Transmilenio donde los únicos beneficiarios son 3 compañías y los usuarios no han visto la disminución de tarifas, como se les prometió hace 10 años, cuando empezó a funcionar el sistema articulado de buses rojos y verdes.

 


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