El mundo no conocía una angustia tal desde el año 1928 cuando empezó la crisis de las bolsas de valores de Londres y Wall Street cayeron desatando una crisis mundial a nivel económico, la cual duro aproximadamente 10 años.
Aunque el mundo ha conocido crisis duras después de 1928 como la asiática y la Rusa, fue la desestabilización de la actividad productiva de los Estados Unidos la que ha puesto a temblar los cimientos del capitalismo.
En 1928 el único país que no se vio afectado por la crisis fue la naciente Unión Soviética, la cual no tenia relaciones comerciales con ninguna potencia económica del momento debido al veto que se le impuso al gobierno Estalinista de la época.
Lo triste de la situación es la poca visión que tiene el gobierno colombiano y los empresarios del país para afrontar las etapas de crisis que se presentan, y la única salida que ven viable son los acuerdos comerciales.
Resulta imposible creer que los actuales dirigentes del país, encabezados por el Presidente Uribe, no hayan aprendido estas lecciones básicas y siga soñando que la vía al desarrollo sean los Tratados de Libre Comercio con cualquier país del mundo, cuando no tenemos uno o mas productos con un alto desarrollo tecnológico e indispensable para la población.
Atrás, no se quedan nuestros queridos empresarios, donde la única solución posible para ellos, es la ampliación de las preferencias arancelarias y la eliminación de estos para sus productos, porque de lo contrario, solo queda cerrar las empresas.
El posicionamiento real de una economía en el ámbito internacional, tiene que ir acompañado de un desarrollo técnico – innovador, un aumento de la infraestructura local, un fortalecimiento del mercado interno, un programa de industrialización, un mejoramiento de la demanda y luego si abrir las fronteras.
Resulta molesto escribir de este tema repetitivamente, pero toca hacerlo dado que los empresarios siempre están presionando al gobierno nacional para buscar acuerdos comerciales porque de lo contrario se vería en peligro el empleo y por ende el bienestar de los colombianos, puras mentiras, cuanto no le gustaría a los patronos bajarle a los salarios, no pueden porque la Ley se los prohíbe pero su generosidad en el salario mínimo lo dice todo.
Si hemos de seguir el modelo económico del mercado, nuestros dirigentes deberían aprender como a sido el desarrollo de estos y como las dinámicas propias de cada país industrializado fueron traducidas en políticas eficientes y no hacer una copia burda de estas, dado las diferentes diferencias que podamos presentar con los diferentes países.
En 1928 el único país que no se vio afectado por la crisis fue la naciente Unión Soviética, la cual no tenia relaciones comerciales con ninguna potencia económica del momento debido al veto que se le impuso al gobierno Estalinista de la época.
Lo triste de la situación es la poca visión que tiene el gobierno colombiano y los empresarios del país para afrontar las etapas de crisis que se presentan, y la única salida que ven viable son los acuerdos comerciales.
Resulta imposible creer que los actuales dirigentes del país, encabezados por el Presidente Uribe, no hayan aprendido estas lecciones básicas y siga soñando que la vía al desarrollo sean los Tratados de Libre Comercio con cualquier país del mundo, cuando no tenemos uno o mas productos con un alto desarrollo tecnológico e indispensable para la población.
Atrás, no se quedan nuestros queridos empresarios, donde la única solución posible para ellos, es la ampliación de las preferencias arancelarias y la eliminación de estos para sus productos, porque de lo contrario, solo queda cerrar las empresas.
El posicionamiento real de una economía en el ámbito internacional, tiene que ir acompañado de un desarrollo técnico – innovador, un aumento de la infraestructura local, un fortalecimiento del mercado interno, un programa de industrialización, un mejoramiento de la demanda y luego si abrir las fronteras.
Resulta molesto escribir de este tema repetitivamente, pero toca hacerlo dado que los empresarios siempre están presionando al gobierno nacional para buscar acuerdos comerciales porque de lo contrario se vería en peligro el empleo y por ende el bienestar de los colombianos, puras mentiras, cuanto no le gustaría a los patronos bajarle a los salarios, no pueden porque la Ley se los prohíbe pero su generosidad en el salario mínimo lo dice todo.
Si hemos de seguir el modelo económico del mercado, nuestros dirigentes deberían aprender como a sido el desarrollo de estos y como las dinámicas propias de cada país industrializado fueron traducidas en políticas eficientes y no hacer una copia burda de estas, dado las diferentes diferencias que podamos presentar con los diferentes países.