{image}http://eldia.co/images/stories/180111/003.jpg{/image}El pasado 9 de diciembre de 2010, se inicio la discusión formal del pliego de peticiones de los trabajadores de la industria del Carbón, agrupados en Sintracarbon y la Empresa Cerrejón, sin llegar a ningún acuerdo en la etapa de arreglo directo, la cual termino el día 28 del mismo mes.
Igor Díaz, Presidente Nacional de Sintracarbon, manifestó que terminada la etapa de arreglo directo, no había una propuesta clara de la empresa para los trabajadores, por tanto el sindicato como muestra de dialogo y voluntad política decidió prorrogar la negociación con el fin de llegar a un acuerdo positivo para los trabajadores con el fin de evitar una parálisis de la compañía.
Para Sintracarbon, la última propuesta de la empresa es completamente regresiva para los intereses de los trabajadores, especialmente en los puntos relacionados con Salarios, primas, bonos, seguridad social, subsidios de educación, aseveró Igor Díaz.
Una vez hecha la propuesta de la administración del Cerrejón a los representantes del Sindicato, se realizará la Gran Asamblea Nacional de Delegados en Riohacha, donde se determinó o no aprobar la propuesta realizada por la administración de la empresa, porque no ofrecen alternativas de solución real a los problemas de los trabajadores carboneros.
En caso de no haber un acuerdo en la etapa de arreglo directo, Sintracarbon cuenta con 10 días para tomar una de las 2 vías que le presenta la ley colombiana para arreglar su conflicto laboral, ya sea a través de un tribunal de arbitramento, o la huelga general.
La votación directa en Sintracarbon se iniciaría el día 20 de enero y se prorrogará hasta el día 27 del mismo mes, y en caso de triunfar la opción de huelga, se vería una parálisis total en las oficinas del Cerrejón en Bogotá y Barranquilla, así como la mina en la Guajira, donde se verían afectados más de 9 mil trabajadores, comentó Igor Díaz.
Los trabajadores carboneros exponen lo mejor de sus años a las minas, las cuales consumen lentamente su vida, por tanto, las reivindicaciones de Sintracarbon a la multinacional del Cerrejón son justas, y van acordes a las ganancias presentadas por la compañía, lo cual muestra el afán de ganancia de los empresarios internacionales sin importarles el bienestar de los colombianos.